El sindicato acusó que la medida “ha instaurado el miedo en la universidad”, casa de estudios
que desde la administración anterior presenta una deuda, todavía no justificada, de 7.600
millones de pesos.
A propósito de la noticia difundida por la directiva de la Universidad Alberto Hurtado, el
sindicato de esa casa de estudios acusó que la rectoría ha llevado adelante una
reestructuración poco transparente, sin dialogar con las y los trabajadores. La semana recién
pasada un total de 55 trabajadores y trabajadoras de la Universidad Alberto Hurtado fueron
desvinculadas en un solo día, cifra que se suma al plantel académico y administrativo que ya
había sufrido bajas con 32 despidos en mayo.
En lo que va de este año casi 90 personas han sido despedidas en dos tantas, eso desde que
asumió el nuevo rector de la casa de estudios. Cristián del Campo Simonetti asumió el puesto
luego que el anterior rector Eduardo Silva S.J. saliera de su cargo, tras lo que comenzó una
auditoría que hasta ahora arrojó una deuda por 7.600 millones de pesos.
Para el sindicato, las declaraciones entregadas por la directiva se refugian en argumentos que
no se sostienen considerando la historia financiera de la universidad, en este punto apuntaron a
que solo se evidencia la nula crítica del rector en torno a una gestión financiera y administrativa
evidentemente deficiente. “Esto ha dañado profundamente la salud mental de la comunidad,
donde se ha instaurado un régimen del miedo”, indicaron desde la directiva sindical.
Por otra parte detallaron que esa mala administración y mala gestión, liderada por el exrector
Silva, ha repercutido en las y los trabajadores, quienes han pagado el costo de los años en que
la fiscalización a la rectoría no fue suficiente. “Como trabajadores hemos pagado con nuestros
puestos cada uno de los pesos adeudados por la administración anterior. Los despidos han
creado un ambiente laboral inestable, que ha instaurado el miedo en la universidad, un espacio
educativo donde el patrono es un sindicalista”, indicó la presidenta del Sindicato de
Trabajadoras y Trabajadores de la Universidad Alberto Hurtado, Cristina Quezada.
En primera instancia fueron 32 las personas despedidas, hasta que la semana pasada se
conoció la nueva cifra que ha dejado a casi 90 familias en la inestabilidad, “son hogares que
también cargan con el aumento en el costo de vida a nivel nacional”, afirmaron desde el
sindicato.
“Estas decisiones han dañado al sector administrativo, a la academia y seguro repercutirán en
el alumnado. Son despidos que se originaron tras la mala administración de la universidad y la
crisis económica en la que está. Como sindicato lamentamos esta medida porque hemos
intentado dialogar y mediar para que la reestructuración de las unidades fuese un acuerdo con
los trabajadores”, agregó Quezada.
Ante la decisión irrevocable de la institución, el sindicato buscó negociar un orden en los
despidos que aminorara los daños, como partir con la desvinculación de quienes querían dejar
la casa de estudios ante el panorama incierto, sin embargo, esta y otras propuestas no fueron
acogidas por los organismos superiores.
La presidenta del sindicato concluyó que el plan que ha trazado la rectoría ha sido una
desilusión para la comunidad educativa en su conjunto: “encontramos lamentable que en una
universidad que dice tener vocación de servicio público tome estas medidas a espaldas de los
trabajadores, como lo haría cualquier empresa que no se sostiene bajo los valores de bien
común, solidaridad y búsqueda de una sociedad más justa como resalta esta universidad.
Vemos que esos valores evidentemente han sido pisoteados”, concluyó Quezada.
Fuente: U.A. Hurtado.