- Se proyecta que para 2040, la proporción de electricidad generada a partir de fuentes renovables aumentará considerablemente, pasando del actual 6% a un 40%.
- Más del 80% de la demanda energética actual se satisface mediante el uso de combustibles fósiles, y el 95% de la distribución de energía se realiza a través de sistemas obsoletos y desconectados, por lo que expertos hacen un llamado a sacar provecho de este recurso.
Santiago, abril de 2024 – El aumento de los niveles de CO2 está acelerando el calentamiento global a un ritmo alarmante. Según datos recientes de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), las emisiones de gases de efecto invernadero han alcanzado un nuevo récord histórico de 57,4 gigatoneladas de dióxido de carbono equivalente (GtCO2e). Un preocupante incremento que sugiere una crisis ambiental inminente en el marco del 54º aniversario del Día de la Tierra, encendiendo las alertas sobre sus graves consecuencias, como el aumento de las temperaturas y la escasez de recursos naturales en diversos países del mundo.
Ante este escenario, los asuntos Medioambientales, Sociales y de Gobernanza (ESG) ganan cada vez más protagonismo en la agenda del mundo privado. El 2022 marcó un punto de inflexión al convertir estos conceptos en una prioridad tanto para líderes empresariales como inversores y consumidores en apenas seis meses tras la publicación del sexto informe del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) de ese año, el que reveló la urgencia de alcanzar el pico de emisiones de gases de efecto invernadero para el 2025 y luego reducirlas rápidamente a cero, si queremos evitar consecuencias climáticas irreversibles.
El rol de la Electricidad 4.0 en la crisis climática
A lo largo de las cuatro revoluciones industriales, el mundo ha experimentado transformaciones profundas, especialmente en sectores como la manufactura y la energía. Mientras que cada una de estas revoluciones ha sido reconocida por sus avances, el impacto en el ámbito eléctrico es particularmente relevante. Estamos en la era de la Industria 4.0 y la “Electricidad 4.0”, donde la digitalización y la convergencia entre tecnología digital y energía eléctrica están redefiniendo la eficiencia y la sostenibilidad.
En palabras de Schneider Electric, compañía líder en eficiencia energética y automatización, la Electricidad 4.0 es clave para construir un mundo más sostenible y resiliente. Lina Bernal, directora de Secure Power para el Clúster Andino, destaca dos puntos fundamentales. Primero, la electrificación como una solución más verde y eficiente, cuyo potencial es de tres a cinco veces más eficiente que otras fuentes energéticas, lo que la convierte en el candidato principal para la descarbonización.
Se proyecta que para 2040, la proporción de electricidad generada a partir de fuentes renovables aumentará considerablemente, pasando del actual 6% a un 40%, por lo que la digitalización será un segundo factor crucial para crear un futuro más inteligente. La innovación moderna se basa en la integración de tecnología digital con sistemas eléctricos, impactando la forma en que trabajamos, vivimos y nos desplazamos. Este enfoque también impulsa la transición hacia una movilidad más sostenible, marcando el camino hacia un mundo más limpio y eficiente.
“A pesar de estas innovaciones, la realidad es que aún dependemos en gran medida de tecnologías del siglo pasado. Más del 80% de nuestra demanda energética se satisface mediante el uso de combustibles fósiles, y el 95% de la distribución de energía se realiza a través de sistemas obsoletos y desconectados. Esta situación oculta tanto el desperdicio de energía como las oportunidades para eliminarlo, lo que subraya la necesidad urgente de adoptar la Electricidad 4.0 para un futuro más sostenible y eficiente”, dice Bernal.
Schneider Electric ha adoptado el concepto de Net Zero como un pilar estratégico central de su propósito, comprometiéndose a mejorar continuamente este parámetro en toda su cadena de valor en colaboración con todas las partes interesadas. Para alcanzar este objetivo, han establecido una serie de hitos ambiciosos: Prevén tener operaciones neutras en carbono y ahorrar 800 millones de toneladas de CO2 en las operaciones de sus clientes para 2025. Esto además de reducir las emisiones de Alcance-3 en un 35% a 2030, abordando así cualquier emisión relacionada con actividades fuera de su control directo.
“Una de nuestras iniciativas destacadas es el Proyecto Carbono Cero, cuyo objetivo es reducir en un 50% las emisiones operativas de 1.000 de nuestros principales proveedores para el 2025. Lo lograremos mediante la innovación colaborativa y herramientas digitales para fomentar la descarbonización. Este proyecto es un claro ejemplo de cómo la Electricidad 4.0 está impulsando el cambio hacia un futuro más sostenible y eficiente”, concluye la directora de Secure Power para el Clúster Andino de la compañía.
Dada la magnitud de los desafíos ambientales, expertos aseguran que la próxima década será crítica para reducir a la mitad las emisiones de CO2 y así evitar que la temperatura global supere el aumento de 1,5 grados Celsius. Desde la COP26, 74 países se han comprometido a alcanzar emisiones netas cero, por lo que el esfuerzo colectivo será vital para dirigirnos hacia un futuro con emisiones netas cero para 2050.
Fuente: Corpo Comunicaciones.