- Recopilar datos directos de cuidadores para personas con demencia, promover buenas prácticas y experiencias, actualizar los registros a través de la colaboración de universidades y jornadas de capacitación y apoyo para cuidadoras/es fueron algunas de las ideas planteadas durante la jornada.
Las cifras no son concluyentes. Se estima que 35 millones de personas padecen algún tipo de demencia y esta cifra superará los 130 millones al año 2050. En Chile, tampoco hay un catastro definitivo, pero se calcula que alrededor del 1% de la población presenta un cuadro de demencia.
Aunque existe una mayor prevalencia de esta enfermedad en las personas mayores, la demencia puede producirse en distintas etapas del ciclo vital. Desde esa perspectiva es clave la mirada desde las políticas públicas para poder avanzar en su cobertura y tratamiento, luego de haber ingresado al GES.
Por eso, es relevante que la Mesa Técnica Regional de Demencia haya tenido una de sus sesiones en la Universidad San Sebastián con el fin de coordinar intersectorialmente a instituciones públicas y privadas, además de la sociedad civil y la academia para abordar propuestas que mejoren la calidad de vida de las personas con demencia y sus cuidadoras.
José Luis San Martín, Profesional de la Unidad de Salud Mental de la Seremi de Salud Metropolitana encabezó esta primera cita de coordinación y sostuvo que es importante “reconocer y levantar las buenas prácticas en lo que se está haciendo en los distintos territorios a nivel público y privado y en el fondo cómo todo eso se puede poner a disposición de las necesidades de las distintas instituciones y ver cómo se apoya a los cuidadores y cuidadoras”.
Elizabeth González, referente de personas mayores y encargada del programa de personas mayores de la Seremi de Salud Metropolitana Occidente añadió que hay que contar con un catastro de las personas con sospecha, diagnóstico y tratamiento de demencia y saber qué tenemos como gestores de redes en lo público y privado y también desde lo normativo ya que ahora las demencias son parte del GES y existe un mandato y las personas tienen derecho a recibir las prestaciones que corresponde”.
Desde esa perspectiva, Ana Luisa Valdebenito, directora de Escuela de la carrera de Terapia Ocupacional USS señaló que viendo el rol que pueden jugar las universidades se podrían aprovechar “las distintas instancias donde participamos en colaboración con estudiantes, en propósitos que tienen que ver con la Vinculación con el Medio y postular a proyectos y ofrecer apoyo o soporte en la construcción de los catastros Sobre instituciones donde se puedan realizar prestaciones y orientaciones para los y las personas cuidadoras y manejar información del Inter sector y de las localidades y territorios más pequeños o invisibilizados”.
En la misma línea, Patricio Espínola, presidente de la Fundación Encuentros Alzheimer y trastornos Neurocognitivos de Chile señaló que lo que más hace falta en regiones o en las localidades pequeñas es la información sobre los programas y los servicios que tienen algunos organismos como el SENAMA”.
Durante la conversación se planteó la necesidad de capacitar a todas las áreas vinculadas con la demencia. Incorporar a los cuidadores e invitar a participar en la mesa a las personas que están bajo esta condición para que puedan transmitir sus experiencias y contribuir con propuestas.
Por su parte, Alejandra Pinto, encargada de la Unidad de la Memoria del Hospital Salvador Corporación Profesional del Alzheimer y otras Demencias y de la Corporación Profesional de Alzheimer y otras demencias afirmó que “sería bueno contar con una cartera de servicios para entregar a distintas instituciones, además del apoyo a los supervisores clínicos” y precisó que tienen una propuesta planteada al gobierno regional para impulsar un Centro de Atención para Personas Mayores que sea integral.
Prevención
Carolina Moraga, directora del Magíster en Abordaje en Personas Mayores y Envejecimiento de la Universidad Central puso el acento en los niveles de prevención y precisó que “podemos hacer educación y trabajar a nivel de la atención primaria, pero también a nivel prevención secundario y tenemos que ver qué pasa con las personas que están falleciendo con demencia y qué sucede respeto a sus cuidados. Además, hay que incorporar al sector judicial a la mesa intersectorial porque cada vez más aparecen asuntos legales asociados a la demencia”
Finalmente, Paola Reyes cuidadora informal y coordinadora del Grupo de Apoyo de Cuidadores de Adulto Mayor insistió en la necesidad de incorporar al trabajo de la mesa a las personas cuidadoras porque “hemos tomado un rol social diferente. No queremos ser parte de los estudios sino una voz activa de lo que sucede a las personas cuando concurren a un centro de salud y de las barreras a las cuales se enfrentan”.
Desde esa perspectiva y considerando el lanzamiento de un Registro Nacional de Personas Cuidadoras, todos los participantes coincidieron en la necesidad de contar con mejores estadísticas y de impulsar la certificación de las personas cuidadoras.
Fuente: USS