- En seminario organizado por Sofofa-UDD, Rodrigo Valdés abordó el declive de los volúmenes enviados al exterior y la ausencia de nuevos productos que impulsen estas ventas, advirtiendo que “sin crecimiento exportador la verdad es que no nos va a ir bien”.
- La autoridad también criticó a las empresas de estacionamientos que subieron sus tarifas en el marco de la entrada en vigencia de la nueva ley que regula cobros a consumidores.
Santiago, 8 de marzo de 2017.- El ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, planteó la necesidad de reenfocar esfuerzos al desarrollo basado en exportaciones para potenciar el crecimiento de Chile, estrategia que a su juicio demostró buenos resultados en décadas anteriores pero que ha venido perdiendo fuerza.
Al intervenir en el seminario “nuevos vientos de la economía”, organizado por Sofofa y UDD (ver presentación), la autoridad dijo que nuestro país está pasando “por un periodo largo en que nuestra capacidad exportadora ha sufrido enormemente”. Comentó que las exportaciones son vitales porque “cuando Chile exporta crece más”, ya que existe una fuerte correlación entre ambos factores: 1 punto más de exportaciones produce 0,7 puntos de crecimiento. Añadió que el país ha ido perdiendo esta capacidad gradualmente en el tiempo, ya que tras el fuerte aumento de volúmenes exportados entre 1984 – 2007, las cifras muestran estancamiento y no existe una industria nueva que “tire el carro”, como en su momento lo hicieron el vino, el salmón, los bosques o la fruta. Chile también ha perdido participación en el comercio internacional en los últimos años, dijo.
Valdés comentó que además de este arrastre que traemos, en los últimos años el comercio mundial no ha tenido capacidad de crecer y eso se ha traducido en una menor demanda externa. “El mundo en el último par de años no ha crecido tan distinto de antes, nuestros socios comerciales, relativo a su historia, están un poco más débiles, pero las importaciones de nuestros socios comerciales en volumen cayeron en 2016 y en 2015 fueron casi cero. Entonces, cuando decimos que el mundo está malo no simplifiquemos que el PIB del mundo crece normal”, comentó.
Sobre cómo revertir esto y potenciar las exportaciones, dijo que cuando asumió como ministro “me preguntaban cuál es el próximo sector que va a crecer, decía esa no es labor del Estado determinarlo. Después de casi dos años en este trabajo, la verdad es que me voy convenciendo de que estas cosas no aparecen solas”. Así, dijo que es importante definir “si es que tenemos que hacer cosas para facilitar nuevas industrias”, ya que “sin crecimiento exportador la verdad es que no nos va a ir bien”.
Admitió que el escenario para esto no es fácil, ya que por un lado “el proteccionismo ha aumentado y probablemente siga aumentando, entonces tenemos que ser muy activos en los foros mundiales”; y por otro lado, lo que está ocurriendo con el tipo de cambio, que en los periodos de auge de exportaciones estaba sobre $700 pesos a precios de hoy. “Es muy importante considerar también que el tipo de cambio es una guía en este desarrollo exportador que requiere atención”, advirtió, precisando que la receta macroeconómica es “básicamente política fiscal más apretada y política monetaria más suelta”.
En esta línea, aseguró que el gobierno seguirá trabajando fuertemente para promover la agenda de exportación de servicios, que tiene gran potencial y para la cual recientemente se hicieron importantes cambios tributarios. También seguir facilitando las inversiones privadas, con nuevos rubros y estrategias de coordinación que es necesario pensar. “El caso del salmón es paradigmático: tenemos una industria que ha colapsado ya un par de veces, que podría haber crecido más, algo pasa en la coordinación ahí que no fue tan simple de que el sector privado se pusiera de acuerdo de cómo hacerlo . Y así pueden haber otras industrias que no han nacido o que pueden estar bajo amenaza por faltas de coordinación”, señaló.
Reforma tributaria
En su intervención, la autoridad económica dijo que el actual sistema tributario aumentó el costo de capital, lo cual “es doloroso para la empresa y afecta a la inversión”, pero descartó que sea un sistema más complejo que el anterior. “Para la pyme sin duda que el 14 Ter nuevo es muchísimo más simple que lo que teníamos anteriormente. Incluso para las empresas grandes, el sistema semiintegrado simplifica las cosas bastante”.
Agregó que la reforma tributaria “ha sido central para poder mantener cierta capacidad fiscal en Chile y poder enderezar las cuentas”, ya que está recaudando lo previsto inicialmente, en torno a 2% del PIB en el 2016. “Sin la reforma tributaria tendríamos un déficit muy grande, sin duda, probablemente habríamos hecho decisiones de gastos distintas, pero dadas las decisiones de gasto (reforma educacional) esta reforma ha sido central para que las cuentas fiscales se mantengan con un desafío importante, pero no un desafío enorme”.
Recordó que el aumento de la deuda pública ha sido una de las razones principales para que dos agencias de clasificación de riesgo pusieran en perspectiva negativa el rating soberano de Chile, pero destacó que, con todo, el riesgo país es el más bajo de la región y eso demuestra la confianza de los mercados internacionales. Detalló que el Ejecutivo está comprometido en mejorar el balance estructural gradualmente, “ya que hacerlo de forma más rápida implicaría una presión adicional sobre la economía que podría ser costosa”.
Temas de coyuntura
El ministro también abordó algunos temas de la coyuntura, dentro de los cuales enfatizó la importancia de retomar un mayor ritmo de crecimiento “que significa más y mejores empleos, salarios más elevados y más recursos para que el Estado pueda proveer bienes públicos de calidad”. Expresó que la desaceleración no ha tenido un efecto significativo en el desempleo debido a que se ha sorteado con aumentos moderados de los salarios. “La desaceleración no es gratis: los salarios podrían ir subiendo más rápido con más crecimiento. Y, ciertamente, también los ingresos fiscales”, acotó.
Insistió en que en el camino de recuperar el crecimiento es necesario reducir los espacios de incertidumbre y “tener particular cuidado con los incentivos y las reglas del juego”. Puso como ejemplo la propuesta de ajustes normativos en el sector sanitario, que “provocaría serios estragos si fueran ley”, por lo que el Ejecutivo está trabajando con los parlamentarios “para racionalizar los cambios. No podemos invitar a invertir con ciertas reglas, y una vez que se invierte, cambiarlas sin más”.
Valdés también criticó a las empresas de estacionamientos que subieron sus tarifas en el contexto de la entrada en vigencia de la nueva ley que regula los cobros a consumidores. “El aumento de precios no tuvo nada que ver con la ley. Fue, digamos, una subida por el chorro que agrede la confianza a la ciudadanía. El gobierno, a través del Ministro de Economía, se jugó por aprobar una ley equilibrada, contrarrestando cambios que eran muy populares, pero dañinos para la inversión. El aprovechamiento de algunos, que parecen no medir las consecuencias de sus actos sobre la legitimidad del sistema, debería recibir el reproche de quienes pregonan la necesidad de recomponer las confianzas”, sostuvo.
Además, pidió que especialmente en este año de elecciones se actúe con responsabilidad ya que “la tentación de las soluciones fáciles, que no estén apropiadamente financiadas o que tengan efectos colaterales dañinos más adelante, puede ser grande”.
Fuente: Ministerio de Hacienda.