En medio de la contracción del mercado inmobiliario y las restricciones de financiamiento que han llevado a una menor compraventa de segundas viviendas, el modelo de copropiedad sigue expandiéndose a lo largo de Chile, con presencia en, al menos, siete regiones: Coquimbo, Valparaíso, O’Higgins, Los Ríos, Los Lagos, La Araucanía y recientemente la Región Metropolitana.
De acuerdo con datos de TocToc, durante el primer semestre de 2024 la venta de departamentos y casas cayó un 80% y 75%, respectivamente, en comunas con alta presencia de segundas viviendas como Viña del Mar, Pucón, La Serena y Puerto Varas.
En contraste, empresas como Legria, proptech especializada en la venta fraccionada de propiedades, tuvieron un aumento del 50% en su portafolio de segundas viviendas, pasando de 10 a 27 unidades disponibles en destinos como Maitencillo, Las Tacas, Pucón y Lago Ranco.
“Hoy vemos un escenario donde la oferta de propiedades sigue siendo amplia, y los compradores buscan opciones más flexibles y eficientes para acceder a una segunda vivienda. En este contexto, modelos como la copropiedad permiten concretar operaciones en plazos más acotados y adaptarse mejor a las condiciones actuales del mercado”, señala Ignacio del Río, fundador y CEO de Legria.
A diferencia de una compraventa tradicional, donde la venta de una vivienda completa puede tardar más de un año, en el esquema de copropiedad -que en el caso de Legria consiste en la venta de ⅛ de una vivienda- la comercialización de una fracción se concreta en un plazo promedio de 100 días, de acuerdo con la firma.
Estacionalidad y nuevos mercados
El comportamiento del mercado de segundas viviendas también está marcado por la estacionalidad. Según Legria, durante el verano las cotizaciones aumentan en un 40%, con mayor tráfico en sitios web y visitas presenciales a las propiedades. Entre enero y marzo de 2024, la empresa registró 41 visitas de compradores potenciales, con un repunte en agosto, cuando las consultas se duplicaron respecto a los meses previos.
En paralelo, el modelo de copropiedad ha comenzado a expandirse fuera de Chile. En 2024, Legria adquirió una propiedad en Miami bajo este esquema, y en 2025 su planificación aumentó a siete, reflejando un interés creciente por parte de inversionistas locales en destinos internacionales.
Si bien el mercado inmobiliario sigue mostrando signos de desaceleración, las proyecciones apuntan a que los modelos de propiedad fraccionada y otras alternativas seguirán ganando espacio en un sector que busca adaptarse a las nuevas condiciones de financiamiento y demanda.
Fuente: Vital Comunicaciones.