- Un estudio realizado por académicas de la Escuela de Periodismo de la PUCV reveló que la emergencia sanitaria incrementó la importancia otorgada a la difusión científica y la necesidad de formar comunicadores e investigadores enfocados en esa área.
Una investigación surgida en el marco de una tesis de magíster fue el punto de partida para un estudio comparativo referido al interés de los estudiantes de Periodismo por dedicarse a la difusión de la ciencia y las necesidades formativas que identificaban en esa área, antes y durante la pandemia de Covid-19.
Se trata de una investigación desarrollada por Camila Buzzo y Daniela Lazcano, académicas de la Escuela de Periodismo de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso (PUCV), que incluyó la realización de un focus group con estudiantes antes y durante la emergencia sanitaria.
Según pudieron constatar las docentes, la pandemia fue un momento de cambio y visibilización de una labor del periodismo que no era tan evidente y que quedó relevada ante la emergencia sanitaria y la necesidad de contar con información fidedigna y confiable.
“Nosotros veíamos en nuestros estudiantes que había interés pero que no se sabía tanto del trabajo del periodista científico. Existía un interés general, se hablaba un poco de astronomía, algunas terapias del cáncer, pero pasada la pandemia fue muy evidente que los alumnos empezaron a cuestionarse otras cosas. La importancia del periodismo científico frente a una crisis mundial, donde lo que las personas exigían era información sobre lo que estaba pasando, qué era un virus, el porqué de las vacunas, qué tipo de cuidados había que tener y cosas que en general nosotros no nos preguntábamos antes del COVID-19”, explicó Camila Buzzo.
DESAFÍOS DE COMUNICAR LA CIENCIA
La misión de educar, uno de los tres objetivos principales del periodismo, se puso en evidencia fuertemente, explicaron las investigadoras, destacando que los estudiantes fueron más conscientes de la responsabilidad social, la complejidad del trabajo y los desafíos éticos del quehacer del comunicador científico.
“Potenciar las vocaciones de divulgación científica, por una parte, y de periodismo científico, por otra parte, ya que la divulgación de la ciencia también puede venir de la mano de los propios investigadores, son algunos de los desafíos que nos planteamos. Ahí existe un nicho donde puede ser interesante ir desarrollando técnicas de comunicación para divulgar los trabajos de los investigadores”, añadió Daniela Lazcano para referirse al potencial de la enseñanza de la divulgación científica en la universidad.
Asimismo, las investigadoras expresaron que los mayores retos del periodismo científico tienen que ver con la relación con las audiencias y su alta vulnerabilidad ante las fake news, así como la relación con la comunidad científica. Respecto a los aprendizajes, aseguran que el periodismo científico evolucionó de nicho especializado a necesidad social; se relevó su rol educativo; y surgieron más y nuevas necesidades de especialización para ejercer esta tarea.
Fuente: PUCV