Su abuso ha llevado a personas a ser hospitalizadas por daño en el hígado, llegando en algunos casos a necesitar un trasplante.
Cuando tenemos dolor de cabeza o muscular, fiebre o cualquier otro malestar general, aparece el Paracetamol como la primera alternativa para aliviar los dolores; de hecho, es uno de los pocos medicamentos que pueden tomar las mujeres embarazadas, generando la sensación de que es un fármaco inocuo y que su abuso no puede hacernos daños.
El mal uso del Paracetamol en Chile se refleja en cifras de la consultora IMS Health, en las que se demuestra que este medicamento ha tenido un incremento en sus los últimos cuatro años, con 10.498.691 cajas vendidas el año 2013, llegando a 13.042.992 el año 2016.
El Paracetamol es un analgésico-antipirético, útil para el tratamiento sintomático a corto plazo de estados dolorosos y febriles y, como todo medicamento, puede tener efectos adversos asociados a su uso.
Según los datos del Centro Nacional de Farmacovigilancia del Instituto de Salud Pública de Chile (ISP), el Paracetamol figura entre los 5 medicamentos con mayor número de efectos adversos graves en Chile, notificados durante el año 2016.
La lista es encabezada por Glibenclamida, indicado para el manejo de la glicemia, seguido por la combinación de Lamivudina+Zidovudina, para tratar el Virus de Inmunodeficiencia Humana; luego viene Acenocumarol, usado como anticoagulante y después Paracetamol, que es el único medicamento de esta lista que se vende sin receta médica. El listado lo cierra Rituximab, utilizado para la artritis reumatoide.
En el caso de Paracetamol, su mal uso ha causado que algunas personas lleguen al hospital con daño hepático, provocando desde una hepatitis hasta el colapso del hígado, siendo, en algunos casos, el trasplante de órganos la única opción de tratamiento, e incluso ha provocado la muerte. Este mal uso se da, por ejemplo, cuando se usa de manera inadvertida dos o más medicamentos que contienen este principio activo en forma simultánea, o cuando, al pretender un efecto más rápido o de mayor magnitud, se toma el medicamento con una dosis o frecuencia mayor a las recomendadas.
Las principales reacciones adversas notificadas en Chile, relacionadas con la ingesta de éste fármaco, son las que afectan a la piel, como erupciones y picazón, además de problemas gastrointestinales como náuseas y vómitos y malestares neurológicos, como cefalea y mareos.
“Uso Responsable de Medicamentos”
Preocupados por promover el uso responsable de los medicamentos, el director del Instituto de Salud Pública de Chile, Dr. Álex Figueroa, junto al Subsecretario de Salud Pública, Dr. Jaime Burrows, lanzaron la campaña comunicacional “Los Vivaceta: Uso Responsable de Medicamentos”.
Los Vivaceta son una familia chilena que busca que la ciudadanía se reconozca al realizar acciones que puedan generar riesgos en la salud, principalmente con el uso de los medicamentos, con la excusa de que “todo el mundo lo hace”, es así como sus hijos, al pertenecer a una generación más informada sobre los riesgos a los que se exponen, los invitan a cambiar estas prácticas y prevenir conductas de riesgos.
El objetivo es prevenir la automedicación, informar sobre cómo almacenar adecuadamente los medicamentos, advertir sobre los riesgos de comprarlos en lugares no establecidos, invitar a acudir siempre al médico haciendo todas las consultas necesarias y, además, difundir información sobre la alternativa de medicamentos genéricos.
Esta campaña nace a raíz de preocupaciones de la ciudadanía, expresada en diálogos participativos, donde se plantea la necesidad de mejorar la información que se entrega sobre los efectos adversos de los medicamentos y su responsabilidad en el uso.
La primera temporada de “Los Vivaceta” consta de seis capítulos, donde, a través de situaciones cotidianas, se busca educar sobre el uso responsable de los medicamentos.
Fuente: Instituto de Salud Pública.