- Accesibilidad y limitaciones para el desarrollo de proyectos energéticos fueron los principales resultados del estudio liderado por el Centro Tecnológico Kipus de la Universidad de Talca y la Seremi de Energía.
El Maule enfrenta diversos desafíos en materia de energía, uno de ellos es la accesibilidad a los lugares rurales, además de otras limitaciones que existen en el territorio para el desarrollo de proyectos energéticos.
Se trata de los principales hallazgos del estudio que comenzó hace poco más de un año, como parte del Plan Estratégico de la Región del Maule (PEER), liderado por el Centro Tecnológico Kipus de la Universidad de Talca en conjunto con la Seremi del ramo, el cual tiene como objetivo orientar el desarrollo de una política energética regional.
En el diagnóstico de este plan se detalló que la región tiene una capacidad instalada de 2.263 megavatios (MW) con 108 centrales en operación y 82 subestaciones (7,3% del país). Sin embargo, también expresó brechas energéticas como que, el 99,6% de los hogares tiene acceso a suministro eléctrico y el 12% no cuenta con energéticos para el agua caliente sanitaria.
A partir de ello, se definieron Lineamientos Energéticos Territoriales (LET), entre lo que destacan la vinculación del desarrollo económico-productivo con la transición energética; conservación del patrimonio natural; fomento a la educación en energía y eficiencia energética mediante la formación de capital humano que promueva el desarrollo laboral y emprendimiento local; y la incorporación de energías renovables, electromovilidad y biocombustibles sólidos a través de la innovación y aplicación de tecnologías sustentables.
Ante estos resultados el Plan sostiene que la Región del Maule se presenta como “un líder nacional en la adopción de energías renovables con un emplazamiento armónico y compatible con el territorio”.
Relevancia
La directora de Kipus UTalca, María Luisa Del Campo Hitschfeld, explicó que “este estudio lo que buscó fue recoger las oportunidades de mejora y de desarrollo a través de estos proyectos de energía, para cumplir esa brecha y esas necesidades, entonces no solamente nos quedamos con el problema, sino que también está la solución para que también pueda ser indicador para el futuro desarrollo”.
En tanto, la seremi de Energía, Erika Ubilla González, subrayó que la iniciativa contribuye a contar con un instrumento que permita dar a conocer lineamientos estratégicos para el Maule, “áreas que pueden ser priorizadas, potenciales energéticos, recordemos que tenemos un fuerte compromiso de lograr la carbono neutralidad. Nuestra región ha ido creciendo fuertemente en materia energética en el ámbito de energías renovables”, expresó.
“Nos va a abrir el abanico y diversificar la matriz en temática eólicas, geotérmicas, mareomotriz. Hay distintas fuentes energéticas que podemos ir desarrollando y visualizando con innovación y tecnología en el territorio”, agregó la seremi.
Trabajo con la comunidad
Para hacer este diagnóstico se realizaron talleres participativos en Talca, Curicó, Linares y Constitución con diferentes actores del sector público, privado y las comunidades.
“No sólo hemos contado con información de estudio realizado por la academia y distintas empresas que han levantado información, sino que, desde el territorio, la misma comunidad busca plasmar sus necesidades en términos de desarrollo energético para su territorio”, destacó la directora de Kipus UTalca.
“Este es el primer instrumento y la primera política energética en la región que nos va a permitir visualizar cuáles son nuestros potenciales y cómo vamos a ir desarrollando el territorio de manera justa con las comunidades”, recalcó Ubilla.
Fuente: Universidad de Talca