El 4 de mayo van a empezar los alegatos en la Corte Internacional de Justicia en el tribunal de la Haya. Se está viendo una excepción presentada por Chile respecto de la demanda boliviana en contra de nuestro país, la que básicamente sostiene que este tribunal internacional no tiene competencia en esta materia.
Es muy importante que todos los chilenos tengamos claro por qué el tribunal de la Haya no tiene jurisdicción para reconocer esta demanda. El año 1948 se firma el pacto de Bogotá, que establece que la Corte Internacional de Justicia iba a tener competencia para conocer las disputas que se puedan suscitar entre los países signatarios.
Sin embargo, en el artículo sexto se establece claramente que aquellos temas que han sido resueltos por tratados internacionales, suscritos por países miembros en años anteriores, es decir antes de 1948, están resueltos y por lo tanto no van a ser competencia ni jurisdicción de esta corte. Este es el caso de Chile y Bolivia, con el tratado de 1904, 44 años antes del pacto de Bogotá.
En segundo lugar, y yendo más a los temas de fondo, hay que decir que el tratado de 1904 fue suscrito de manera libre y voluntaria. Acá no hubo coacción, no hubo fuerza; es más, en Bolivia la gente celebró la firma de este acuerdo en los albores del siglo XX.
Este es un tema bilateral entre ambos países. Lamentablemente, Bolivia ha intentado transformarlo en un tema multilateral, llevándolo a foros internacionales, haciendo una campaña propagandística y comunicacional, faltando a la verdad o diciendo las cosas a medias. Esto es inaceptable y estoy convencido que lo hacen porque saben que jurídicamente no tienen ninguna posibilidad ante los argumentos chilenos.
Chile ha cumplido todas las obligaciones contraídas el año 1904. Por ejemplo, construyó el ferrocarril de Arica a la Paz, dando a Bolivia acceso directo a algunos puertos de Chile en condiciones de privilegio. Nuestro país vecino tiene acceso al mar, obviamente no es soberano, porque esa es una situación que quedó claramente establecida en el tratado de 1904.
Además, el hecho que Bolivia no tenga acceso al mar esto no es causa de sus problemas. Hay muchos países que no tienen acceso al mar y son desarrollados. Este es el caso de Suiza. Podemos decir con alegría que en los últimos años Bolivia ha crecido mucho y su economía ha tenido un fuerte dinamismo, lo que demuestra que efectivamente no hay una relación directa entre la falta del acceso soberano al mar y su situación económica.
El viernes 10 de abril voy a estar en Quito, Ecuador, compartiendo con los presidentes de los parlamentos de Unasur de nuestro continente para darles a conocer los argumentos jurídicos de Chile. Ha habido un lobby y una campaña propagandística comunicacional por parte de Bolivia que ha desinformado a otros países de nuestro continente y del mundo, por eso se hace muy necesario dar a conocer nuestra posición.
Hace algunos días me reuní con 70 embajadores del mundo que me fueron a saludar a raíz de haber asumido la presidencia del Senado. Naturalmente, aproveché la oportunidad para clarificar nuestros puntos y señalarles que Chile tiene argumentos jurídicos sólidos que respaldan su posición.
Si se llegase a considerar la demanda Boliviana, situación que no va a ocurrir, se crearía una tremenda incertidumbre e inseguridad jurídica, porque cualquier país podría cuestionar los tratado limítrofes que tiene con otros países. Eso sería derogar el derecho internacional, establecer un caos jurídico. Por eso es tan importante defender nuestros intereses, nuestros principios y el tratado de 1904, pero por sobre todo, nuestra dignidad e integridad territorial como país soberano.
Fuente: Prensa Senado.