Además, Sindicato de docentes chilenos presentará demanda contra la Fundación por tratos discriminatorios y violación de derechos fundamentales.
Con pancartas y un gran alboroto se despertaron los vecinos de la comuna de Lo Barnechea, producto de un gran número de manifestantes que pacíficamente iniciaban una protesta a las afueras del colegio más exclusivo de Chile. “En este nido no todas las águilas son iguales” acusaba uno de los carteles que se portaban entre los cerca de 100 profesionales pertenecientes al sindicato del colegio Nido de Águilas esta mañana, con el objeto de dar a conocer el inicio de una huelga por discriminación en las condiciones laborales y prácticas anti sindicales por parte de la administración del establecimiento, transformando la habitual calma que diariamente se vive en el sector.
Según lo expresado por el presidente del sindicato, Ramsey Lawrence, los puntos de discordia con los directivos del colegio se producen por las abismantes diferencias en las condiciones salariales entre profesores entrevistados en el extranjero y en Chile. Los primeros ganan en promedio el doble que los locales, tienen derecho al 100% de beca para que sus hijos estudien en el colegio, asignación de vivienda, suculentos bonos y otros beneficios. Los chilenos en cambio no tienen derecho a esas gratificaciones -y las que reciben son significativamente inferiores- y desde el 2002 les quitaron el beneficio de becas para sus hijos, aún cuando algunos llevan más de 15 años trabajando en el colegio.
“No podemos ser tratados como ciudadanos de segunda categoría. Tenemos las mismas labores y responsabilidades que nuestros pares extranjeros, por lo tanto, merecemos el mismo trato. La discriminación es inaceptable” dice el dirigente y profesor de historia. “Teníamos la sospecha de que además de las becas había diferencia en los sueldos y bonos. Sólo con una medida prejudicial se pudo acceder a los contratos y liquidaciones de sueldo y certificamos que las diferencias son impresionantes y abusivas” agregó.
Sumado a esto, los manifestantes también denuncian la incorporación por parte del empleador de una cláusula en el contrato colectivo que obligaría al sindicato a renunciar a cualquier futura petición y potencial reclamo, en todos los ámbitos, mientras este tenga vigencia. “No es aceptable que se nos quiera forzar a firmar una renuncia anticipada de nuestros derechos como sindicato. Eso viola la democracia, los derechos individuales y laborales de las personas” agrega Lawrence.
Un ejemplo claro de las prácticas antisindicales que el colegio habría llevado a cabo es la última entrega de un bono en este mes de enero, que se hizo extensible a todos los funcionarios nacionales, menos a los docentes y personal administrativo sindicalizados, en una clara medida para desactivar la huelga y debilitar al sindicato. El escándalo se produce justo en momentos que inicia su tramitación la futura reforma laboral, que fortalece el rol de los sindicatos y el derecho de los trabajadores.
Fuente: Sindicato de Profesores y Administrativos del colegio Nido de Águilas.