Es vital que las personas no hagan movimientos bruscos, que se mantengan en altura y que no corran bajo ningún punto de vista, ya que pueden ser vistos como una presa por el animal.
Según dicen los expertos, es muy poco frecuente encontrarse con un puma en las zonas urbanas -e incluso rurales- de Chile. Aun cuando la cuarentena pudiese generar que los animales silvestres se sientan más seguros saliendo de su hábitat, sigue siendo algo esporádico. Incluso en un parque o un sendero, estos animales silvestres tienden a huir de las personas.
“Lo primero es quedarse tranquilo porque por lo general sus apariciones son fortuitas. Y en caso de que ocurra esa coincidencia, el puma se va a alejar. Sin embargo, si una persona se ve frente a frente con un animal de esta especie, es vital no hacer movimientos bruscos ni correr. Si corres, el puma te podría ver como una presa”, explica el Médico Veterinario, académico e investigador de la Universidad San Sebastián, Doctor Javier Cabello Stom.
También es importante tomar en brazos a los niños pequeños. “Mostrar altura permite que los pumas vean a las personas como una amenaza porque no se enfrentan a otro ser vivo con un tamaño mayor”, dice.
Por otra parte, si se trata de una hembra con crías, ésta puede ser más agresiva porque querrá defenderlas. En un caso así, la recomendación sigue siendo quedarse quieto y retroceder lentamente, sólo si las circunstancias lo permiten.
“Lo que NO hay que hacer en ningún caso es intentar defenderse. Cuando hay peligro o se sienten acorralados, el animal silvestre ataca. De lo contrario, simplemente escapará”, menciona Cabello.
Finalmente señala que, en caso de sospecha de puma en algún parque o sendero, se pueden hacer ruidos con palos o gritar para que huya. Y, en caso de avistamiento de un puma en la ciudad, hay que recordar que está protegido por la Ley de Caza y, por ende, se debe llamar al Servicio Agrícola Ganadero.
Fuente: USS.