Un significativo paso dio el proyecto, en segundo trámite, que sustituye el sistema electoral binominal por uno de carácter proporcional inclusivo y fortalece la representatividad del Congreso. Ello, luego que la Comisión de Constitución concluyera con la revisión de las 159 indicaciones que recibió la iniciativa durante su debate en particular.
En la jornada, que no estuvo exenta de polémica se abordaron las normas relativas a la composición del Senado y se acogió una indicación del Ejecutivo que rebaja de 7 a 5, el número de senadores en la Región Metropolitana.
Sin embargo, manteniendo el número de 50 integrantes de la Cámara Alta redistribuyó los dos cupos, aumentando en 1 los representantes para la Región de Antofagasta y de Los Ríos. Esta definición se suma a la acordada en la víspera sobre la composición de la Cámara de Diputados aumentando de 120 a 155 sus integrantes.
No obstante, se mantuvieron las fuertes discrepancias entre senadores de la Nueva Mayoría, -Felipe Harboe, Pedro Araya y Alfonso de Urresti- y de la Alianza, Alberto Espina y Hernán Larraín respecto a las fórmulas que se despacharon. A juicio de los senadores Larraín y Espina, muchas de las normas son inconstitucionales y adelantaron que recurrirán al Tribunal Constitucional porque “se vería afectada la igualdad del voto”.
En tanto, el senador Harboe, presidente de la instancia, desestimó las críticas porque lo fundamental es “terminar con el sistema binominal que ha sido fuente de descrédito de la política”.
Ahora corresponde que se armonice el texto del proyecto completo antes de que quede en condiciones de ser remitido a la Comisión de Hacienda para que se pronuncie sobre las normas de su competencia. Según dio a conocer el senador Harboe, se espera realizar esta revisión final el próximo 5 de enero y que el proyecto pueda pasar esa misma semana a la Comisión de Hacienda para que luego, la Sala del Senado pueda pronunciarse en particular.
ARGUMENTACIONES
El senador Harboe junto con ratificar que se optó por un criterio de “descentralización” en la composición del Senado, expresó su satisfacción porque “por primera vez en 25 años un proyecto que pone fin al binominal llega a esta instancia de tramitación”.
Respecto a la polémica por el número de parlamentarios precisó que “si bien no es popular el aumento de los parlamentarios los líderes políticos no estamos para lo popular. Hay que terminar con el sistema binominal que es la principal fuente de descrédito de la política”. Aseveró que “la arquitectura de sistema binominal ha impedido que las demandas puedan traducirse en las trasformaciones necesarias. Se debe establecer un sistema más participativo”.
Argumentó que “los partidos tradicionales se resisten porque piensan que se produce inestabilidad pero estamos en una crisis hace tiempo”. “La gente no se siente representada por los partidos y ha llegado el momento para que la gente exprese sus ideas en el Parlamento”
Al ser consultado sobre las dudas que existen respecto a las falencias con respecto a la participación de los pueblos originarios, el senador Harboe dijo “creo que no es un proyecto perfecto”. “Me habría gustado llegar a acuerdos y espero que esto sea perfectible para que sean pensadas en beneficio de los ciudadanos”.
DUDAS DE CONSTITUCIONALIDAD
En la vereda opuesta, el senador Espina calificó la iniciativa como “un mal proyecto” que no respetó los compromisos políticos previos entre RN y la Concertación, dijo, por lo que anticipó que junto a su par, Hernán Larraín realizarán un estudio de constitucionalidad de las normas.
Junto con criticar el aumento del número de parlamentarios y advertir sobre los problemas de financiamiento afirmó que “lamentablemente no ha prevalecido un criterio de política de Estado. Se ha repartido en la Cámara los cupos para dejar contentos a parlamentarios comunistas que no estarían en Congreso y se ha buscado satisfacer a los actuales parlamentarios”.
Agregó que “simplemente no nos queda más que hacer presente no es verdad que con menos senadores y diputados no se podría haber llegado a un sistema proporcional y lamentar que no se haya incorporado ni una palabra en torno a una ley de cuotas indígenas”. Recordó que hace más de 3 meses entregó a la Presidenta Bachelet una propuesta con el respaldo de ex Presidentes con las beses de un acuerdo de paz con el mundo indígena que consideraba su participación en la institucionalidad”.
SABOR AMARGO
A su turno, el senador Larraín manifestó que queda “con un sabor amargo”, porque “aquí han primado los intereses políticos, el intereses de corto plazo, lo de favorecer a una determinada coalición, el buscar un sistema electoral que les permita perpetuarse en el poder en forma indefinida y creo que eso le causa daño”
Por ello anunció que recurrirán al Tribunal Constitucional, “porque no habiendo acuerdo para corregir con criterio, con sentido común y justicia, vamos a recurrir al Tribunal Constitucional para que se aplique la ley que establece la igualdad del voto a nivel constitucional”
El parlamentario manifestó que, “hemos hecho todo lo posible en el Senado, por buscar acuerdos a lo cual el gobierno se ha negado de manera sistemática, solo porque llegó a un acuerdo, que para favorecer a determinados sectores políticos, tuvo que entregar compensaciones que son claramente injustas”.
Aseguró que lo acordado en la Cámara Baja, “se pudo haber cambiado en el Senado, pero aquí han convertido al Senado en un buzón y no hemos podido corregir errores graves como, desde el punto de vista constitucional, la desigualdad del voto que establece este proyecto”. Respecto a este último punto, Larraín explicó que “con las mismas poblaciones, en algunos distritos se eligen 3, 4 o 5 parlamentarios, mientras que en otros con poblaciones menores, se eligen 5, 6 o 7 diputados”
LEY DE CUOTAS
Consultado por la decisión del gobierno de no introducir la gradualidad en la ley de cuotas. El senador Larraín dijo, que “las cuotas se van a cumplir pero eso no significa que las personas que van a participar van a ser necesariamente candidatas reales”
“Creemos que las mujeres además del aporte que significa su incorporación a la política, son muy buenas candidatas. Sin embargo, nos cuesta conseguirlas por razones de carácter cultural, por lo que significa trabajar en una región y tener que ir a desempeñarse como parlamentaria en Valparaíso”. Por esta razón dijo que es necesaria la gradualidad, “porque los cambios culturales no se hacen por ley, se hacen por procesos que toman tiempo”
Fuente: Prensa Senado.