El diputado UDI Jaime Bellolio cuestionó, además, el impacto de la reforma, diciendo que “las verdaderas pruebas de fuego de la reforma son el 31 de diciembre del 2017, que es la fecha forzosa para que los colegios se transformen en fundaciones o corporaciones; y el 31 de diciembre del 2020, que es cuando los colegios deben ser dueños de su infraestructura”.
A contar del 1 de noviembre y hasta el 30 de diciembre del año en curso, los establecimientos particulares subvencionados podrán comunicar al Ministerio de Educación su decisión de cierre o receso para el año siguiente. Así está establecido por el Decreto N° 315, del propio Mineduc, y que se encuentra vigente desde 2010.
Con este antecedente, los diputados de la UDI desestimaron el anuncio gubernamental respecto del impacto de la reforma escolar, luego que la ministra Adriana Delpiano explicara que 739 establecimientos pasarán a ser gratuitos en 2016 y “sólo” 20 decidieron dejar de recibir la subvención estatal y, por tanto, transformarse en particulares pagados. Y es para éstos últimos, según explicó el diputado Jaime Bellolio, para los que corría el plazo que venció el 31 de agosto.
“Le pediría al Gobierno que lea sus propios decretos. El Decreto 315, en sus artículos 25 y 26, establece que para cerrar los colegios, el plazo comienza en noviembre de cada año y, por tanto, eso todavía está abierto”, afirmó.
Asimismo, el parlamentario precisó que “las verdaderas pruebas de fuego de la reforma son el 31 de diciembre del 2017, que es la fecha forzosa para que los colegios se transformen en fundaciones o corporaciones; y el 31 de diciembre del 2020, que es cuando los colegios deben ser dueños de su infraestructura”.
Por esta razón, Bellolio enfatizó que “nos sorprende que el Gobierno haya dicho que había algo que celebrar. Ha habido una mala utilización de las cifras y están celebrando como que hubiesen ganado un partido que todavía no comienza”.
“Hoy día lo que estamos viendo es que aquellos establecimientos que tenían el copago más bajo (…), se transforman en completamente gratuitos, pero también hay colegios particulares subvencionados donde las familias pagaban 30, 35 ó 50 mil pesos, y van a tener que pagar 120 mil. ¿Ellos dan lo mismo? ¿Esos miles estudiantes dan exactamente lo mismo? ¿Da lo mismo que esas familias no puedan seguir yendo a esos colegios?”, criticó.
En esta línea, Bellolio dijo no entender “por qué al Gobierno no le importa que se cierren colegios. Durante toda la tramitación del proyecto dijimos que no queríamos que se cerraran colegios o que se transformaran en particulares pagados, porque a quienes se perjudicaba eran a las familias más vulnerables y de clase media. Lamentablemente, eso está sucediendo”, y sentenció: “Mientras nosotros queríamos ampliar las posibilidades de esas familias de clase media, esta reforma se las quita”.
Fuente: Prensa Diputados UDI.