- La parlamentaria independiente, cegada por Carabineros cuando se dirigía a su trabajo en noviembre de 2019, se refirió a la petición que le hiciera este miércoles el senador Manuel José Ossandón (RN), quien le ofreció votar a favor del proyecto de ley, junto a toda su bancada, a cambio de que ella liderara conversaciones con La Moneda para liberar a los militares condenados por crímenes de lesa humanidad perpetrados en Dictadura.
Esta mañana, la senadora Fabiola Campillai (IND) se refirió a la tramitación de la Ley de Amnistía a las y los presos del estallido social, proyecto al que el Gobierno le dio Suma Urgencia este martes.
“Le pedí la Suma Urgencia al proyecto de amnistía al Presidente (Boric), mediante el ministro Giorgio Jackson. Ellos estuvieron dispuestos y se envió al Senado, por lo que se estaría votando el 5 de abril…. Pero la verdad es que no hay disposición ni ahora, ni va a haber disposición después”, sentenció.
Ante las interrogantes de por qué considera que no se lograrían los 26 votos requeridos (de un total de 50 senadores y senadoras), señaló que “como está el Senado, no va a haber disposición nunca. Nosotros sabemos quiénes son los que se oponen, y quiénes son los que criminalizan las manifestaciones que ocurrieron desde el 18 de octubre (2019) en adelante”.
Continuó indicando que “tenemos que pensar en otra manera de poder liberar a todos nuestros compañeros presos políticos secuestrados por un gobierno y que aún están allí, en prisión preventiva, por ya más de un año”.
Las declaraciones las realizó en el marco de su participación en un acto cultural realizado por el artista Álvaro Silva en instalaciones del ex Congreso Nacional, quien desplegó una tela gigante con el mapa de Chile, sobre la que distintas personas pueden coser ojos de alambre para reflejar el dolor del país, y rendir homenaje a las cerca de 500 mujeres y hombres que perdieron sus ojos tras la brutal represión policial ocurrida en el marco del estallido social.
En el lugar, compartió con la Presidenta de la Convención Constitucional, María Elisa Quinteros, a quien le pidió expresamente trabajar para que se apruebe el cierre del Senado, porque “no lo necesitamos, ahí se entrampan las leyes. (Las y los senadores) no quieren reparar todo lo que pasó, y están en contra de dar siquiera una señal de humanidad. El Senado no puede seguir”.
Consultada por estos dichos, la senadora Campillai explicó la razón de su sentir: “ayer me faltaron el respeto terriblemente. Se me condicionó el voto para la ley de amnistía, pidiéndome que le solicitara al presidente (Boric) el indulto para los presos de Punta Peuco. Así se me condicionó el voto para sacar a nuestros compañeros, que ni siquiera han hecho nada al lado de esos asesinos que hoy están muriendo, pero que jamás pensaron en el sufrimiento cuando mataban y violaban sin ninguna conciencia”.
Agregó que “se me dijo que las familias de ellos estaban sufriendo, pero qué pasa con las cientos de madres que aún buscan a sus hijos, y que estos hombres de Punta Peuco jamás han tenido ni siquiera una gota de arrepentimiento, o han dicho siquiera dónde están esos cuerpos”.
“Se me faltó el respeto porque ‘ese’ senador se atrevió a decirme que tenia que hablar con el Presidente, para pedirle el indulto a esos asesinos. Yo no puedo creer que esto haya pasado. No puedo creer que de esa manera se condicione un voto. No puedo creer la comparación que están haciendo desde la derecha, con los jóvenes presos y presas del estallido hoy día. Ese parlamentario fue el senador Ossandón”, aclaró.
“Él me dijo que yo soy un ‘símbolo’, y que me saltaría quizás cuántas cosas pidiendo la libertad de esos presos que no la merecen”, añadió en referencia a que el parlamentario de Renovación Nacional le insistió en que este “gesto” a los militares -que cumplen condena en la cárcel de Punta Peuco por cometer crímenes de lesa humanidad durante la Dictadura-, podría destrabar la tramitación del proyecto de amnistía, y que solo así podría contar con los votos de los 11 senadores y senadoras de la bancada RN, lo que permitiría superar los 26 votos requeridos en Sala para aprobar en primer trámite la iniciativa.
La respuesta de la senadora fue tajante: “jamás lo pediría ¡Jamás! Poque le faltaría el respeto a un país completo, que si tiene memoria”.
Eliminar el senado
Por todo, la parlamentaria san bernardina explicó su petición a la presidenta Quinteros: “siento que es ahí (en el Senado) donde se entrampan las leyes, donde no quieren que haya un poco de reparación. No quieren la paz, y solamente se criminaliza a todo lo que pasó en el estallido social y lo que pasa hasta hoy. No se tiene conciencia, y se trata de subir las penas para poder darle más años de cárcel a los jóvenes que están ahí hoy”.
“Yo pienso que el Senado realmente no sirve, y me gustaría que desapareciera”, finalizó.
Fuente: Prensa Senadora Fabiola Campillai