Este 1 de septiembre se vive el reajuste del salario mínimo, según lo que se acordó en la negociación del 2023, que compromete llegar a los 500 mil pesos en julio del 2024. El secretario general de la CUT, Eric Campos, fue claro en destacar que “esto beneficia a 2 millones de trabajadores y trabajadoras directa e indirectamente, ya sea por el aumento del salario o las gratificaciones”.
“Cuando se discutió el salario mínimo, los economistas de derecha predecían una catástrofe de inflación y desempleo por la quiebra de miles de empresas. Lo que evidentemente no ha sucedido. Desde el aumento del salario mínimo, el IPC y el desempleo están dentro de las expectativas de control”, aclara el secretario general de la Central de Trabajadores, recordando que “este acuerdo tiene una cláusula intermedia que, si el IPC del período anterior es superior al 7%, en enero tendremos un nuevo incremento de 10 mil pesos más, llegando a los $470.000”.
“En estas dos últimas negociaciones, hemos logrado incrementar en 150 mil pesos el salario mínimo. Partimos en el 2022 en 350 mil pesos y ahora aumentamos a 460 mil pesos”, manifiesta Eric Campos, recordando que “este acuerdo no solo habla de montos, sino de beneficios. Por eso este 2024, no veremos reajuste salarial, pero si condiciones laborales”.
Es importante recordar que hoy las pymes son parte de esta ley del salario mínimo, “participando con un subsidio que antes no habían tenido. Este acuerdo en un país tan desigual permite equiparar la cancha y contribuir a que las familias tengan un bienestar y mejores condiciones de vida, avanzando en superar la línea de la pobreza” concluye el secretario general de la Central, destacando que una de las demandas históricas de la CUT es superar la línea de la pobreza en materias salariales.
Fuente: CUT