- Los cortes generados en la Ruta 5 y en los puentes ferroviarios demuestran la vulnerabilidad de la conectividad del transporte en el país, que generan problemas de traslado de bienes y personas, con el consecuente daño económico, manifestó el académico de la UTalca, Miguel Ángel Arriagada.
Puentes cortados, atochamientos prolongados en la carretera y la imposibilidad de circular de algunos trenes son algunas de las consecuencias que el reciente sistema frontal dejó en el país, evidenciando la vulnerabilidad de las rutas de transporte terrestre.
Así lo detalló el director de la Escuela de Ingeniería Civil en Obras Civiles de la Universidad de Talca, Miguel Ángel Arriagada, quien manifestó preocupación por la falta de vías alternativas frente a estos hechos. “El país ha tomado una decisión de potenciar la infraestructura vial a través de concesiones, lo cual ha sido un crecimiento enorme, sin embargo, ha generado que otras vías no se desarrollen”, explicó.
Según detalló el académico, este sistema concesionado se financia por su uso, por tanto, no hay incentivo para generar rutas alternativas, que generen resiliencia en caso de que la ruta principal se vea afectada.
Arriagada sostuvo que, si bien existen algunos avances orientados a resolver esta problemática en la carretera, la vía ferroviaria se encuentra más vulnerable. “Actualmente en la red principal, que es la Ruta 5, se están generando algunas mejoras con by pass, que van a permitir la construcción de nuevos puentes y vías alternativas en caso de que falle la principal, esto si bien ayuda al tránsito vehicular, no favorece al sistema de trenes donde hay una sola vía”, puntualizó.
Cabe recordar que actualmente la ruta ferroviaria se encuentra afectada por el daño en puentes que se produjeron por el desborde de los ríos y las inundaciones, como en el caso de los puentes Longaví y Lircay. Según manifestó el especialista, estas “son reparaciones que no demoran poco tiempo, por tanto, el sistema queda sin funcionar durante meses con los consecuentes perjuicios económicos que trae una situación como esa”.
Rutas alternativas
El ingeniero civil en obras civiles aseguró que es fundamental generar opciones para evitar que el tránsito se corte en caso de catástrofes. “Faltan estrategias para dotar a Chile de infraestructura más resiliente o resistente. Necesitamos tener alternativas viales reales, que tengan un estándar de velocidad y puedan permitir el paso de vehículos pesados”. El especialista agregó que, a pesar de que actualmente existe una ruta costera y algunos caminos en la precordillera, estos no cumplen con los estándares que permiten ser una posibilidad real para el transporte de bienes.
Además, recalcó que la topografía del país puede presentar desafíos en cuanto a la accesibilidad. “Hay que recordar que la geografía de nuestro país provoca que los ríos nos corten en muchos tramos del territorio, por lo tanto, las estructuras de los puentes son primarias y de gran importancia para la conectividad, cuando se ven dañados simplemente cortamos esta ruta”, señaló.
“Tenemos que generar distintas vías o alternativas que nos permiten que, en caso de que falle una, tener otra ruta real y que pueda ser usada por vehículos de todo tipo, sobre todo el transporte de camiones que son los que nos abastecen y nos permiten tener constante mercadería en todo el país”, estableció.
En esa misma línea, advirtió que, se debe contemplar también el abastecimiento de otros servicios básicos. “Debemos pensar no tan solo en redes viales, sino que, en el agua potable, la electricidad, las comunicaciones y en todos estos elementos dada la geografía de nuestro país, que se nos corta en un punto y básicamente quedamos divididos, como lo que nos pasó ahora, eso no puede ocurrir”, puntualizó.
Fuente: Universidad de Talca