Luego de más de diez años de exhaustiva investigación, el hallazgo de registros y documentos históricos que demuestran el temprano uso de la palabra Pisco en 1733, sumado a la sólida evidencia aportada por el Archivo Nacional e INAPI, el historiador argentino Pablo Lacoste afirma que se logra “demostrar que el pisco nació en Chile, y se ha desarrollado en este país, como producto típico, durante al menos tres siglos”.
Fue en la actual localidad de Pisco Elqui, en la Hacienda La Torre, donde se usó por primera vez la palabra “pisco” para denominar al aguardiente de uva elaborado en la zona. Así fue registrado formalmente en un Protocolo labrado por el Escribano del Imperio Español, en 1733, conservado actualmente en el Fondo Judicial de La Serena del Archivo Nacional, en Santiago de Chile.
El historiador Pablo Lacoste describe cómo la existencia de tres botijas de pisco en dicha hacienda inició la costumbre de utilizar la palabra pisco en Chile y aporta suficientes pruebas que reconoce el relevante papel de los campesinos del actual Norte Chico de Chile en el proceso de creación, difusión y consolidación del pisco chileno.
Ello, porque a su juicio “durante mucho tiempo, algunos intereses económicos y políticos negaron la identidad chilena del pisco y sobre todo, su profundidad histórica. Se construyó un relato sobre la supuesta supremacía peruana sobre el pisco chileno y a partir de ese relato fantástico se realizaron acciones diplomáticas tendientes a lograr el desconocimiento del pisco chileno”. Esta conferencia de prensa se realiza en el marco de una nueva celebración del Día del Pisco en Chile y a 85 años de decretada la Denominación de Origen del pisco.
Para Pablo Lacoste, no hay dudas de que el Pisco nació en Chile y señala como pruebas que la primera etiqueta de pisco chileno fue registrada formalmente como Marca Comercial y Marca de Fábrica, en Chile en 1882, mientras que en Perú, la primera etiqueta de “pisco” se registró formalmente en 1922. Asimismo, la delimitación del pisco como Denominación de Origen, por medio de una norma legal, se produjo en Chile en 1931 y en Perú, en 1994.
En la conferencia de prensa realizada en el Archivo Nacional, el destacado investigador abordó la reconstrucción que realizó de los tres siglos de historia del pisco chileno, en que se demuestra cómo los campesinos chilenos logran inventar un producto nuevo, llamado pisco, “con ciertas características dadas por sus materias primas (uvas pisqueras), sus métodos de elaboración y sus prácticas culturales, todo ello en un contexto preciso (paisajes del pisco)”.
En la ocasión, y respaldando el desarrollo de esta investigación, la directora del Archivo Nacional, Emma De Ramón, exhibió excepcionalmente los tres volúmenes originales del siglo XVIII que muestran la evidencia de la elaboración de pisco en Chile en esa centuria (en Perú eso no ocurrió hasta el siglo XIX). Por su parte, el director de INAPI, Maximiliano Santa Cruz hizo lo propio exhibiendo tres volúmenes originales del siglo XIX con las primeras etiquetas de pisco registradas en Chile.
Fuente: cgonzalez@mgconsulting.cl